SUSANNE WENGER Al ingresar en el “SE Musiclab”, situado cerca de la estación de tren de Wabern, en el municipio de Köniz, de pronto se encuentra uno en una gran sala de siete metros de alto. Hasta 1996, este edificio, situado al pie de la loma de Gurten, era utilizado por la Gurtenbrauerei para llenar sus botellas de cerveza y apilar sus pesadas cajas. Son contados los espacios tan apropiados como este, explica Jürgen Strauss, fundador del “SE Musiclab”. Cuando puso manos a la obra, este bernés de 57 años tenía un claro plan en mente: quería crear unas condiciones de escucha óptimas para la música y otros sonidos. Para ello, el espacio debía tener la altura suficiente y poder soportar una importante carga superficial. “Para crear condiciones acústicas óptimas en el edificio”, explica Strauss, “se usaron cien toneladas de material”. Todo este material se destinó a la realización del “laboratorio”, un espectacular habitáculo circular insonorizado. Una construcción dentro de otra construcción: en eso consiste el núcleo del Musiclab, un espacio de cinco metros de alto y once de ancho, con un doble revestimiento de 60 toneladas de arcilla y 40 de madera. La capa exterior, compuesta por 32 000 Las afueras de Berna abrigan un laboratorio acústico único en el mundo El “SE Musiclab”, en las inmediaciones de la ciudad de Berna, es una novedosa y extraordinaria instalación acústica. Su fundador y creador, Jürgen Strauss, no ha escatimado esfuerzos para equipar una antigua fábrica de cerveza con una acústica de primer nivel. Hemos visitado este nuevo universo sonoro. esferas de arcilla, fue construida por un robot de la Escuela Politécnica Federal de Zúrich. Con su brazo prensil, el incansable robot trabajó durante tres meses: gracias a este sofisticado proceso de construcción reina en las entrañas del laboratorio un silencio absoluto. “Aquí impera un silencio más profundo que en el más silencioso valle de los Alpes suizos, bajo un espeso manto de nieve”, asevera Jürgen Strauss. Sonido tridimensional El laboratorio está insonorizado de tal manera que ningún sonido consiga Jürgen Strauss, pionero de la acústica, ante su obra maestra: el laboratorio “Musiclab”. Al fondo se aprecia la pared hecha con 32 000 esferas de arcilla. Foto: Remo Neuhaus Panorama Suizo / Diciembre de 2022 / Nº6 28 Cultura
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