Panorama Suizo 3/2023

Las votaciones federales del 18 de junio de 2023 en breve Imposición mínima para las grandes empresas Como miembro de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), Suiza se ha comprometido a introducir un impuesto mínimo aplicable a las grandes empresas transnacionales. Así, estas empresas que tengan un volumen de negocios superior a los 750 millones de francos estarán sujetas a un impuesto mínimo del 15 por ciento. Esto significa que numerosas multinacionales presentes en Suiza deberán pagar más impuestos que en la actualidad, lo que a su vez aportará ingresos adicionales a las arcas públicas. Aunque este mecanismo acordado a nivel internacional no es objeto de discusión, las partes no se ponen de acuerdo sobre cómo repartir los ingresos adicionales. La clave de reparto decidida por el Parlamento prevé que tres cuartas partes de estos ingresos adicionales vayan a parar a los cantones, y solo una cuarta parte a la Confederación. Por ello, el PSS se opone al proyecto: desea que una mayor parte se quede en las arcas nacionales. (TP) Por una mayor protección del clima y un incremento de las inversiones en energías renovables Suiza deberá alcanzar la neutralidad climática de aquí al año 2050. La ley federal sobre Objetivos de Protección del Clima, Innovación y Aumento de la Seguridad Energética regula la manera de conseguirlo (véase artículo de la izquierda). Este texto constituye una contrapropuesta indirecta a la iniciativa no partidista de los glaciares, que entretanto ha sido retirada. A esta nueva legislación se opone la UDC. (TP) La Ley Covid de nuevo en el punto de mira Pese a la suspensión de las medidas de lucha contra el coronavirus, el Parlamento ha prorrogado la Ley Covid hasta finales de 2024, como medida cautelar. Por tanto, se mantiene provisionalmente la base legal para una eventual reactivación de los certificados covid; por ejemplo, para ingresar en otros países. La asociación “Freunde der Verfassung” [Amigos de la Constitución] está luchando contra la revisión de la ley; ha recurrido por tercera vez a la vía del referendo. (TP) tes y el sector de la construcción. Para ello hacen falta inversiones masivas en tecnologías libres de CO2. Con este fin, el Parlamento ha acordado un programa de incentivos por un total de 3 200 millones de francos. De ellos, 2 000 millones se destinarán a reemplazar, en un período de diez años, los sistemas de calefacción de gas y petróleo. Otros 1 200 millones de francos se destinarán a impulsar nuevas tecnologías. La “iniciativa de los glaciares” ejerce presión Esta ley constituye una contrapropuesta a la iniciativa conocida como “iniciativa de los glaciares”. La Asociación Suiza para la Protección del Clima, de carácter no partidista, ya lanzó esta iniciativa popular a principios de 2019 y en muy poco tiempo recogió las 100 000 firmas necesarias. La presión popular surtió efecto: el Parlamento se puso manos a la obra. Satisfecha con la propuesta de ley, la asociación retiró su iniciativa, pero con una condición: en caso de que el proyecto del Parlamento sea rechazado el 18 de junio, la iniciativa de los glaciares podría someterse al veredicto popular en una fecha posterior. Pese a su amplia aceptación en el Parlamento, la ley de protección climática no cuenta con el apoyo de todos los partidos políticos. Así, la UDC ha promovido un referendo contra lo que denomina “Ley de derroche de la energía eléctrica”. Este partido asume que se disparará el consumo eléctrico si en un futuro solo se permite circular con vehículos eléctricos y se recurre a las bombas de calor eléctricas para calentar los edificios. Ya desde ahora Suiza sufre escasez de electricidad, argumenta la UDC, la cual teme, además, que los propietarios de inmuebles deban pagar costes adicionales si a largo plazo se ven obligados a sustituir sus calefacciones de gas y petróleo. Por su parte, quienes apoyan la ley hacen hincapié en las inversiones financiadas con fondos públicos para promover las energías renovables, tales como la energía solar, hidráulica y eólica. Ofensiva solar y energía hidráulica Independientemente de la Ley de Protección Climática, el Parlamento ya decretó el otoño pasado una ofensiva solar. Esta ofensiva permitirá construir cuanto antes grandes instalaciones fotovoltaicas, una de las cuales está prevista en el cantón del Valais (véase Panorama Suizo, 1/2023). Además, las dos cámaras debaten actualmente la cuestión de la seguridad del suministro eléctrico, con el afán de generar más energía a partir de fuentes renovables en Suiza, especialmente, energía hidráulica. Con este fin se impulsarán quince proyectos de presas, capaces de suministrar electricidad adicional, sobre todo en invierno. Por ejemplo, está previsto construir un embalse bajo el glaciar de Trift (véase Panorama Suizo, 1/2022). Sin embargo, los opositores temen que quede relegada la protección de la naturaleza. Por ello, en este caso también es probable que el pueblo tenga la última palabra en torno a esta propuesta. Mientras tanto, el destino de la Ley de Protección Climática se decidirá en las urnas, el 18 de junio. Se tratará también de una primera prueba para el nuevo Ministro de Energía y Medio Ambiente, Albert Rösti (UDC). En su anterior cargo de Consejero Nacional y portavoz de los grupos de presión de la industria petrolera, Rösti luchó en primera fila contra el abandono de los combustibles fósiles. Ahora, su cargo de Consejero Federal lo obliga a respaldar una ley para una mayor protección del clima, en contra de la voluntad de su propio partido. Una imagen desoladora de las cumbres de la Bernina: del glaciar Diavolezza solo quedan estrechas franjas, que en verano deben cubrirse totalmente con tela para asegurar su conservación. Foto Keystone Panorama Suizo / Mayo de 2023 / Nº3 11

RkJQdWJsaXNoZXIy MjYwNzMx