UBS adquiere Credit Suisse, el Gobierno federal y el Banco Nacional aportan ayuda multimillonaria El gran banco suizo Credit Suisse (CS) toca fondo y es adquirido por su rival, UBS: así acabó, en marzo de 2023, el suspense bancario que mantuvo en vilo a Suiza. La absorción por parte de UBS solo fue parcialmente voluntaria. Este paso era necesario para salvaguardar a Suiza como bastión bancario y evitar que la economía nacional se viera gravemente afectada, explicó la dirección de UBS. Antes de la adquisición se vivieron días dramáticos. La confianza en CS cayó en picado a principios de marzo. Además de los problemas internos, las dificultades de los bancos estadounidenses también provocaron una creciente desconfianza. Esto llevó a clientes e inversores a retirar miles de millones de las arcas de CS. El 16 de marzo, el Banco Nacional le otorgó un préstamo de 50 000 millones de francos, como medida de emergencia. La intervención no sirvió de mucho. Por ello, el Consejo Federal y la Autoridad Suiza Supervisora del Mercado Financiero (FINMA) ordenaron a los directivos de CS y UBS que entablaran negociaciones, el 19 de marzo. El resultado se dio a conocer esa misma tarde: UBS adquiriría CS por tres mil millones de francos. La Ministra de Finanzas, Karin Keller-Sutter, consideró la adquisición como una buena solución del sector privado en interés de la colectividad. Sin embargo, no se trata en realidad sino de un nuevo rescate estatal de un banco, aunque sea con la colaboración indirecta de otro. El Gobierno Federal y el Banco Nacional ofrecen garantías por valor de 250 000 millones de francos; además, en virtud de la ley de emergencia, la Confederación aporta otros 9 000 millones de francos para cubrir riesgos. La desaparición de CS posee dimensiones históricas: este banco, que surgió del Schweizerische Kreditanstalt (SKA) cofundado en 1856 por el pionero industrial Alfred Escher, jugó un papel decisivo en el desarrollo de la infraestructura moderna de Suiza. (MUL) Debe acelerarse la protección medioambiental Las medidas de lucha contra el cambio climático deben acelerarse, exige el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático, en su informe presentado recientemente en Interlaken (BE). Los expertos estiman que los riesgos del calentamiento global son mayores que hace nueve años, cuando publicaron su anterior informe. Incluso con un incremento limitado de las temperaturas es probable que se produzcan fenómenos extremos, tales como sequías e inundaciones. El objetivo sigue siendo limitar el calentamiento a 1,5 oC o muy por debajo de 2 oC. Para lograrlo se requieren mayores esfuerzos, también en Suiza. Más sobre este tema en las páginas 10 y 11. (TP) Emil Steinberger Emil Steinberger, o simplemente Emil, celebró en enero su 90.° cumpleaños. Y sigue siendo, hasta el momento, el cabaretista más aclamado de Suiza. Desde los años setenta, los espectáculos de este cómico nacido en Lucerna han entretenido al público de todo el país, de todas las generaciones y de todas las ideologías: un auténtico tour de force. Las actuaciones de Emil en el teatro, la televisión, e incluso en el circo Knie durante un año, siguen arraigadas en la memoria cultural del pueblo suizo. Ya se trate de “La comisaría”, “El telegrafista”, “El guía de montaña”, “Los proverbios campesinos” o “El cochecito de bebé”, mucha gente todavía se sabe de memoria pasajes enteros de sus sketchs. Para este artista, que comenzó siendo empleado de Correos, le bastaba un mínimo de accesorios: hacía reír a la gente con su mímica, sus gestos y sus palabras. Emil encarnaba algo típicamente suizo, incluida la torpeza, pero también algo universal en su forma de ser, a veces superada por los acontecimientos, y ello sin ceder nunca a la malicia. Así explica el Neue Zürcher Zeitung el éxito que este cómico también tenía en Alemania. Inolvidable fue el papel de Steinberger en la taquillera película “Die Schweizermacher”, una caricatura del estricto procedimiento de naturalización. Emil emigró de Suiza a los sesenta años, para establecerse en Nueva York. Regresó en 1999, para volver a actuar. Completó una gran gira en diciembre pasado. Emil vive ahora en Basilea, y a pesar de su avanzada edad tiene un papel muy activo en Twitter, con su buen humor y su gran afabilidad. “Muchas personas que no conozco me confiesan que he estado con ellas toda la vida”, dijo en una entrevista reciente, “otras dicen que en familia hablaban como Emil”. La verdad es que Emil nunca buscó tanto revuelo: “Tan solo quería actuar y hacer reír a la gente”. SUSANNE WENGER Panorama Suizo / Mayo de 2023 / Nº3 8 Selección Noticias
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