DENISE LACHAT En Barcelona, un grupo de lugareños indignados salen a la calle con pancartas y al grito de “¡Turistas, fuera!”, mientras que en las ciudades suizas la población expresa su enfado a través de los instrumentos que le brinda la democracia directa. “Proteger la vivienda, regular Airbnb” es el nombre de la iniciativa aprobada en 2023 en la ciudad de Lucerna. Actualmente, la región de la Jungfrau está siguiendo su ejemplo: en cinco ciudades (Unterseen, Interlaken, Matten, Wilderswil y Bönigen) se reunieron en un abrir y cerrar de ojos las firmas necesarias para promover sendas iniciativas municipales con el mismo lema, afirma Hanspeter Berger, Copresidente de la sección Bödeli-Jungfrau del PSS, que encabeza el proyecto. “El tema de Airbnb preocupa mucho a la población; no es una cuestión de izquierdas”, confirma Jürg Müller-Muralt, de Unterseen, que ha participado en el proyecto de la iniciativa. “El día en que se llevó a cabo la asamblea municipal para debatir el tema”, declara Müller-Muralt, “el pabellón multiusos estaba abarrotado. Nunca había visto algo así”. Airbnb, un motivo de preocupación No es casualidad que la población suiza esté tan preocupada. La tendencia es “inquietante”, confirma la Oficina Federal de Vivienda en su último informe, ya que en muchas regiones suizas hay cada vez menos viviendas de alquiler a largo plazo. ¿Es Airbnb el culpable? La plataforma de alquileres a corto plazo es, al menos, uno de los factores que agravan la situación. Hanspeter Berger lo tiene claro: “Airbnb, que ofrece rendimientos hasta cuatro veces superiores a los del mercado de viviendas de alquiler a largo plazo, es hoy en día un modelo de negocio con repercusiones poco éticas. Reduce el espacio habitable para los lugareños y hace que se dispare el precio de los alquileres”. Considera especialmente chocante que se gane dinero rápido con los turistas a través de Airbnb, mientras que los empleados del sector turístico, que a menudo perciben salarios modestos, ya no pueden permitirse vivir cerca de su lugar de trabajo. ¿Qué hacer? Las cinco iniciativas populares a nivel municipal se proponen hacer menos atractivo el “modelo de negocio de Airbnb” limitando el alquiler a través de plataformas de reserva a un máximo de noventa días al año. Gracias a esta medida se pretende que el alquiler convencional a largo plazo vuelva a ser atractivo para los propietarios de viviendas. La regla de los noventa días no es una novedad: se aplica ya en varias ciudades de Europa y de Suiza. El cantón de Ginebra la introdujo ya en 2018; el cantón de Vaud adoptó una normativa similar en 2022 ; y desde principios de año, la ciudad de Lucerna también está aplicando la iniciativa mencionada en líneas anteriores, que incluye esta restricción. David Roth, su impulsor en Lucerna, espera que la situación pronto se estabilice. En vista de que incluso los pisos en mal estado se renuevan rápidamente, se llenan de literas y se alquilan a La escasez de viviendas en Suiza aviva el debate sobre Airbnb En Suiza, los inquilinos apenas encuentran viviendas asequibles, entre otras razones debido a que plataformas de reserva como Airbnb retiran constantemente viviendas del mercado de alquiler. Ahora, algunos municipios empiezan a tomar cartas en el asunto para contrarrestar esta tendencia. Panorama Suizo / Octubre de 2025 / Nº4 24 Turismo
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